Este 2025 es el año para recordar a una de las grandes figuras del cine español: Lola Gaos. Se cumplen 50 años del estreno de Furtivos (1975), la película de José Luis Borau en la que la actriz valenciana obtuvo su primer papel protagonista, consolidando su legado como una de las más grandes del cine y el teatro español. Además, por primera vez, los premios del audiovisual valenciano llevarán su nombre, reconociendo su talento y compromiso. Este mes de febrero también se conmemora el 50 aniversario de la Huelga de Actores de 1975, un hito histórico en el que Gaos jugó un papel fundamental.

Lola Gaos: Arte y activismo en una misma voz

El libro Lola Gaos. La firmeza de una actriz rescata su legado no solo en la interpretación, sino también en la movilización social y política. Hija y hermana de intelectuales republicanos, Lola se convirtió en un símbolo de resistencia y lucha por los derechos de los actores en un tiempo donde las condiciones laborales eran precarias.

La huelga de actores de febrero de 1975 marcó un antes y un después en el sector. Fue la primera huelga general que unió a toda la profesión y tuvo una gran repercusión dentro y fuera de España. Asociaciones de actores internacionales mostraron su apoyo, y el movimiento se consolidó como un paso crucial hacia la dignificación del trabajo actoral.

La Huelga de Actores de 1975 y el papel clave de Lola Gaos

Gaos fue una de las líderes del «comité de los once», el grupo de actores elegidos como interlocutores con la Administración. Entre sus compañeros estaban figuras como José María Escuer, Juan Margallo y Luis Prendes. Su objetivo era claro: ser ellos mismos quienes representaran al sector en la negociación del nuevo convenio laboral, evitando la intervención del sindicato vertical franquista.

Las condiciones que denunciaban eran extremas: dobles funciones diarias, ensayos no remunerados, sin descanso dominical y contratos precarios. En este contexto, la presencia de Lola Gaos fue determinante. Su voz rótula y firme resonó en la asamblea de 400 actores encerrados en el Sindicato Nacional del Espectáculo en Madrid. Aún sin haber sufrido la operación de cuerdas vocales que marcó el final de su carrera, su discurso era contundente: “Nos llaman artistas y nos niegan la categoría de trabajadores para que no tengamos los mismos derechos”.

Una activista incansable en la Transición

Más allá del teatro y el cine, Lola Gaos fue una figura clave en la lucha por las libertades en España. Participó en actos a favor de la amnistía para los presos políticos, firmó manifiestos y estuvo presente en homenajes a escritores y poetas represaliados por el franquismo. En 1976, acudió a los actos de homenaje a Miguel Hernández en Orihuela y Elche, donde la represión policial fue brutal. También viajó con Gabriel Celaya, Luis Goytisolo y Blas de Otero a Fuente Vaqueros para rendir tributo a Federico García Lorca.

El legado de Lola Gaos en el cine español

Su compromiso con la profesión y la justicia social la hicieron una actriz imprescindible en la Transición. Su filmografía abarca desde Viridiana (1961) de Luis Buñuel hasta Tristana (1970) y Furtivos (1975), película que sigue siendo un referente del cine español.

Hoy, cinco décadas después, su nombre sigue resonando en el cine, el teatro y la lucha por la dignidad del trabajo actoral. Con los premios del audiovisual valenciano bautizados en su honor, Lola Gaos sigue viva en la memoria cultural de España.

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