Tras el impacto de La Salvaje, Paula Mattheus vuelve a sorprender con Autotune, un single que combina sensibilidad, crítica social y la inconfundible huella folk que la caracteriza. Producida por Juan Guevara, la canción nace de una pesadilla simbólica y se convierte en un relato descarnado sobre la alienación, la fragilidad y la búsqueda de lo auténtico en un mundo que parece desmoronarse bajo la superficie.
Un viaje sonoro entre la fragilidad y la fuerza
En Autotune, Paula Mattheus conjuga emoción y firmeza con una narrativa introspectiva que dibuja paisajes de incertidumbre, soledad y esperanza. La voz de la artista emerge con una sinceridad que rompe cualquier artificio: “La verdad siempre sale a la luz”, repite el estribillo, como un recordatorio de que la autenticidad sobrevive incluso en tiempos dominados por lo superficial.
Una producción con sello propio
Con la producción de Juan Guevara, la canción mantiene un equilibrio entre la delicadeza acústica y la potencia emocional. Las imágenes del videoclip oficial refuerzan ese contraste: todo se congela, salvo la protagonista, que busca respuestas en un universo cada vez más hostil.
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Un manifiesto contra lo artificial
Autotune es, en palabras de la propia artista, “un grito silencioso contra las máscaras”. Con un tono crítico pero esperanzador, Paula Mattheus se niega a adaptarse a lo falso, a lo impuesto, y se mantiene fiel a una música que, como la vida, “no lleva filtros ni correcciones”.